ability Horizontal En primer lugar, y antes de entrar de lleno al tema del ability, el Autor Guillermo O`Donnell; se refiere a las democracias políticas, o como él prefiere llamarlas “Poliarquías”. Plantea la idea de que estas poliarquías son complejas e inestables combinaciones entre el Estado y tres corrientes o tradiciones históricas: Democracia, Liberalismo y Republicanismo. O´Donnnel, cuando se refiere al componente liberal, inyectado en las poliarquías modernas, se refiere a la idea de que existen ciertos derechos, que ningún tipo de poder, especialmente el estatal, puede invadir. Para el liberalismo, el área donde la vida se desarrolla de la forma más conveniente e incluso plena es la privada. Con el componente republicano se refiere, a que el desempeño de funciones públicas es una actividad dignificante, que exige una cuidadosa sujeción a la ley y entrega devota al servicio del bien publico, aunque esto signifique el sacrificio de los intereses privados de los funcionarios, al contrario que el liberalismo; para el republicanismo el área mas adecuada para el pleno desarrollo humano es la pública. Por su lado la tradición democrática ignora estas distinciones entre la esfera pública y la esfera privada, es más, la Democracia a diferencia del Republicanismo, no exige que los cargos públicos sean ocupados por personas virtuosas o dedicadas, por el contrario, los procedimientos democráticos, como la rotación o el sorteo, presuponen que todos están igualmente calificados para desempeñar esos papeles. Estas tradiciones tienen orígenes diferentes; la democracia en Atenas, el republicanismo en Roma y luego en varias ciudades Italianas medievales; y el liberalismo en la sociedad Feudal, y más tarde en la Inglaterra de Locke y en la Francia de Montesquieu. El corte dualista planteado por el liberalismo y el republicanismo implica la idea de limites o fronteras que deberían ser rigurosamente reconocidos, este dualismo condujo al republicanismo y el liberalismo a adoptar el mecanismo de la representación política mientras por su lado, el carácter monista de la democracia, es extraño sino hostil a la idea misma de representación. La orientación de los derechos y obligaciones también es diferente: el liberalismo básicamente asigna derechos defensivos a individuos situados en la esfera privada; el republicanismo asigna básicamente obligaciones a individuos que se desempeñan en la esfera pública, y la democracia afirma el derecho positivo a la participación en las decisiones del demos. Sin embargo, a pesar de estas diferencias entre las tres tradiciones, hay un importante punto en común. Y es que la Democracia en sus impulsos igualadores, el liberalismo en su afán de proteger las libertades individuales y el republicanismo en su severa concepción de las obligaciones de quienes gobiernan, cada cual favorece otro aspecto de la fundamental de la poliarquía, este se refiere a la vigencia del estado de derecho. Todos los ciudadanos tienen el mismo derecho de participar en la formación de las decisiones colectivas dentro del marco institucional existente, a esta regla democrática, se
le suma el imperativo republicano, de que nadie, ni siquiera quienes gobiernan, pueden situarse por encima de la ley, y la advertencia liberal de que ciertas libertades y garantías jamás se pueden vulnerar. De esta manera, la poliarquía es el resultado de la combinación de estas tres tradiciones presentadas, no obstante la idea de Democracia ha llegado a identificarse con el proceso de las elecciones competitivas, interpretado como el principio democrático por excelencia, sin embargo la consecuencia de esto es que queda opacado el papel no menor, que el liberalismo y el republicanismo desempeñan en la concepción histórica de la poliarquía. Después de que el autor presenta este contexto de las tradiciones históricas en las poliarquías modernas, pasa a revisar el tema central del texto: El ability Horizontal, sin embargo se hace necesario revisar primero el concepto de ability vertical; que se refiere a que por medio de las elecciones razonablemente libres y regulares, los ciudadanos y ciudadanas puedan castigar o premiar a los gobernantes votando a favor o en contra de ellos en la próxima elección. También es parte del ability vertical, cuando los medios de comunicación cubren actos ilícitos (como por ejemplo casos de corrupción) cometidos por el gobierno y esto genera en la opinión pública un clima de desafección con relación a sus gobernantes, que puede obstruir sus políticas y terminar con su derrota en las próximas elecciones. A pesar de esto, la efectividad del ability electoral esta en duda, esto por las condiciones en que se encuentran muchas poliarquías, en donde existen sistemas de partidos poco estructurados, alta volatilidad de los votantes y de los partidos, pobre definición de los temas de la agenda pública y cambios abruptos en las orientaciones de las políticas publicas, hacen que la efectividad del ability vertical tienda a disminuir. Ahora bien, lo que el autor define como ability Horizontal; es la existencia de agencias estatales que tienen la autoridad legal y están dispuestas y capacitadas para emprender acciones que van, desde el control rutinario hasta sanciones legales o incluso Impeachment, en relación con actos u omisiones de otros agentes o agencias del Estado que pueden ser calificadas como ilícitos. Estas acciones ilícitas pueden afectar principalmente a tres esferas. Primero a la democrática, que es infringida cuando hay fraude electoral por ejemplo. Segundo, a la esfera liberal, que es afectada cuando agentes estatales violan o permiten a actores privados violar libertades y garantías (como la tortura o el derecho de cada persona a un juicio imparcial) y la tercera esfera afectada seria la republicana, aquí se trata de acciones de funcionarios, que electos o no, suelen ocupar altos cargos en el Estado. Estas acciones implican ignorar las exigencias que impone la tradición republicana, es decir que se subordinen a la ley y que den clara prioridad a los intereses públicos, no a los privados. Así, para que ability horizontal sea efectivo deben existir agencias estatales autorizadas, dispuestas a supervisar, controlar, rectificar y sancionar actos ilícitos de otras agencias del estado. Las primeras agencias no solo
deben tener autoridad legal, sino también autonomía suficiente respecto de las segundas. Esto tienen que ver con el tema de la división de poderes de los pesos y contrapesos entre ellos, implica entonces, al ejecutivo, legislativo y judicial, pero en las poliarquías modernas también abarca a diversas agencias de supervisión, como las contralorías, fiscalías y semejantes. También O ´Donnell enfatiza en que para ser efectivas estas agencias no pueden operar de manera aislada. La ability horizontal efectiva no es producto de agencias aisladas sino de redes de agencias en su cima, un poder judicial comprometido con ese ability. La idea central de este ability es la prevención, y/o la sanción (llegado el caso) de las acciones a que los funcionarios son propensos, las transgresiones de los limites de su autoridad. Un problema que surge en las democracias, es que en el corto plazo, el sentido común del ejecutivo, que quiere ejercer las amplias responsabilidades que siente le han encomendado de forma exclusiva, es ignorar aquellas “agencias” y en el mediano plazo, esforzarse por eliminarlas, cooptarlas o neutralizarlas. El ejecutivo siente que mientras más éxito tenga en anular aquellas agencias, mayor es su libertad para tomar decisiones. Un ejecutivo débilmente liberal y republicano intenta maximizar su poder eliminando o negando la validez de otros poderes del estado potencialmente controladores de su gestión. Sin embargo este tipo de ejecutivo se topa con límites, una limitación importante provienen del tamaño de algunos países y de su federalismo, factores que propician la existencia de poderes locales. Pero en general, puede que en el largo plazo, el ejecutivo maximice su poder, si se subordina a estos controles horizontales, no obstante seguir el camino de la no-ability es lo predominante. Por otro lado, se observa que existen dos direcciones principales en que la ability horizontal puede resultar violada. La primera ocurre cuando una agencia estatal invade ilegalmente la autoridad de la otra, la segunda consiste en las ventajas ilícitas que un funcionario publico obtiene para sí mismo y sus asociados. O´Donnell. Denomina a la primera clase como transgresión y la segunda como corrupción. El liberalismo critica las transgresiones de los gobernantes y cree que deben someterse a una ley publica y a una ley privada que protege las libertades y garantías que el liberalismo ampara. El republicanismo por su parte, prohíbe la transgresión y condena la corrupción fuertemente. En tanto la democracia ignora la idea misma de transgresión, a pesar de esto, la democracia hace una contribución importante a la ability horizontal. Esto proviene de que en la democracia la autoridad política emana de todos y cada uno de los del demos, así, los ciudadanos que, ya sea por rotación o sorteo, se hallan a cargo de los asuntos públicos deben tomar sus decisiones en pro del bien común, nunca a favor de sus intereses privados. Porque si el poder es de todos y si cada ciudadano es un participante en la elaboración de las decisiones colectivas, entonces todas las decisiones deben ser públicas, si bien esto no conduce necesariamente a la efectividad de la
ability horizontal, esto sí conlleva a la exigencia de un alto grado de transparencia en la elaboración de decisiones colectivas, esta demanda de transparencia tiene implícita la idea de anti-corrupción. En cambio, el liberalismo, en sí mismo indiferente al imperativo de la transparencia, esta dispuesto a renunciar a el con el fin de promover una mejor protección de los derechos privados que privilegia. Por el lado del Republicanismo, los gobernantes virtuosos encuentran razones para evitar la transparencia de sus decisiones. Con todo el autor manifiesta que la transgresión seria más peligrosa que la corrupción para la supervivencia de la poliarquía, ya que la acción sistemática de la transgresión podría acabar con la poliarquía, mientras que la corrupción deteriora la poliarquía, pero no la elimina necesariamente. O´Donnell, señala que a pesar de lo negativo que pueda parecer el panorama, existen avances, por ejemplo en muchas poliarquías hay un ambiente generalizadote condenar los actos ilícitos, como la corrupción. La malversación de fondos, las coimas, esto es condenado en la mayoría de los países. Esto puede ser la expresión o la consecuencia misma de la débil acción de la ability horizontal, pero el punto importante es que cuando las formas de corrupción llegan a ser visibles, la mayor parte de la opinión publica las condena, pudiendo aumentar las posibilidades de avanzar en la implementación de la ability horizontal. Otro punto favorable para la efectividad de la ability horizontal, tiene que ver con la aparición de diversas organizaciones, que exigen que los funcionarios estatales respeten las libertades y garantías básicas de la población, sobre todo de los débiles y los pobres. Otras organizaciones supervisan las elecciones y asumen otras tareas democráticas, como educar a la población en materia cívica. Todas estas acciones, sin embargo, tienen efectos limitados si no son seguidas de cerca por agencias estatales legalmente autorizadas; que junto con las denuncias y reportajes periodísticos, estas acciones revelan hechos presuntamente ilícitos que de otra manera pasarían inadvertidos. Por otro lado, el autor se pregunta, cómo se puede reforzar la ability horizontal, y da una serie de puntos que pueden ayudar he dicho objetivo. Lo primero que se plantea, es la idea de asignar a los partidos de oposición que han alcanzado un nivel importante de apoyo electoral, un papel relevante en la dirección de las agencias (como por ejemplo las fiscalias) encargadas de investigar casos de transgresión y de corrupción. Pero, y a pesar de esto, nada garantiza que la oposición, sea en estas materias, mejor que el gobierno. O que la oposición prive de los recursos necesarios o coopte a dichas agencias. Luego se plantea, que las agencias que desempeñan un papel esencialmente preventivo, como las contralorías, sean altamente profesionales, cuenten con recursos suficientes y sean independientes del ejecutivo. Sin embargo esto tampoco previene que la corrupción penetre en estas agencias o que el ejecutivo las coopte, o incluso que el congreso (otro poder que puede
determinar la dirección y presupuesto de estas agencias) tenga el mismo afán que el ejecutivo para eliminarlas o neutralizarlas. Como tercer punto, el autor plantea, que sería muy bueno y ayudaría bastante contar con un poder judicial altamente profesionalizado, provisto de un presupuesto, y lo más independiente posible del ejecutivo y del legislativo. Y que en sus decisiones sea claramente autónomo con relación a esos otros poderes. No obstante en todo estos temas, es poco lo que se puede esperar sin la acción activa y persistentes de actores, como los medios periodísticos y varias organizaciones de ability vertical. Las organizaciones y redes transnacionales que promueven diversas formas de ability también pueden aportar ayuda. De esta manera, la efectividad de la ability horizontal depende, en gran medida, de los tipos de ability vertical, aunque no exclusivamente de las elecciones (que solo la poliarquía hace posible) Todo esto refleja un gran problema, que ya se ha mencionado: Los incentivos de muchos individuos en posición de poder para mantener practicas poco liberales y republicanas son extremadamente fuertes, y el componente democrático predominante. De esta manera el autor, y ya para finalizar, si bien reconoce que existen avances significativos referentes a que la opinión pública condena fuertemente actos como por ejemplo la corrupción, no obstante la eficacia de la ability horizontal aún es débil, y requiere aún de mas esfuerzos, especialmente si para lograr un grado significativo de ability horizontal requiere la coordinación de varias agencias, autónomas e independientes del ejecutivo.