Características y estructura del reportaje 55 El reportaje es un texto informativo en el que se desarrolla de manera amplia un tema concreto.
Los reportajes abordan asuntos variados: hechos reales de actualidad y de interés general, asuntos relacionados con la sociedad, los viajes, la ciencia, la cultura, el arte, el deporte, los espectáculos, la política o la economía.
Se ocupan de temas que atraen la atención del receptor por su interés humano, social, etc.
Pueden referirse a una noticia que haya tenido gran repercusión hace tiempo pero en el reportaje se analiza con mayor profundidad y reflexión.
Sus formas habituales de difusión son los medios tradicionales como la prensa escrita, las revistas, la radio y la televisión y los medios de comunicación audiovisual como la prensa y las revistas digitales y la radio y la televisión a través de Internet.
Para realizarlos el reportero suele recoger información aportando datos, testimonios de personas implicadas, declaraciones de expertos y fotografías.
Estructura del reportaje En general, los reportajes se estructuran en cuatro partes:
1. Titular. El título informa acerca de contenido del reportaje. Al igual que las noticias puede ir acompañado de un antetítulo y de un subtítulo.
2. Párrafo inicial o entrada. El objetivo principal de la entrada es captar la atención del receptor. Por ello, es importante que empiecen con contenidos interesantes y atractivos.
3. Cuerpo del reportaje. Los párrafos siguientes desarrollan el tema y deben estar conectados entre sí y escritos con coherencia. Es habitual que estén organizados en epígrafes.
4. Párrafo final. Las oraciones finales deben dejar una buena sensación de la lectura. Pueden incluir conclusiones y dejar la estructura cerrada, acabar con comentarios como los que se escribieron al principio (estructura circular) o hacer comentarios que inviten a la reflexión (estructura abierta). Los reportajes se estructuran en cuatro partes:
el titular
el párrafo inicial o entrada
el cuerpo del reportaje
el párrafo final
Actividad 1.
Une los siguientes pares:
1. Informa sobre el contenido del reportaje.
2. Su misión es captar la atención del receptor.
b) Cuerpo
c) Entrada
d) Titular
3. Desarrolla el tema
tratado.
4. Se incluyen las conclusiones. a) Párrafo final
Ejemplo de reportaje: “El coche cede paso a la bicicleta”
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Ahora vamos a leer un reportaje titulado “El coche cede paso a la bicicleta”, publicado en El Comercio digital.com el 9 de diciembre de 2010 por Ana Salas. Hemos destacado en negrita el titular, en color verde los subtítulos, en color naranja la entrada, en fuente normal el cuerpo del reportaje y en azul oscuro el párrafo final.
El coche cede paso a la bicicleta
« del colectivo Asturies conBici realizan con EL COMERCIO un circuito por el centro, donde la bici tiene prioridad.
El plan que limita a 30 kilómetros la velocidad, casi a punto.
El miércoles de la próxima semana se cumplirá exactamente un año desde que la asociación Asturies conBici presentó al Ayuntamiento su propuesta 'Plan 30 Oviedo: Un proyecto para hacer ciudad'. El Consistorio se comprometió a facilitar la circulación de la bicicleta, pero el colectivo ni se imaginaba que doce meses después estaría implantado. El proceso ha sido rápido, ha tardado apenas un año en ponerse en práctica y cuenta con el consenso, extraño, de los tres grupos municipales con representación en el Ayuntamiento. En la calle, la medida parece haber cogido por sorpresa a los conductores. No todos ven bien la inversión de poco más de 160.000 euros del 'Plan A' con la que el Consistorio de la capital también adopta la recomendación de la Dirección General de Tráfico de aumentar las conocidas como 'zona 30'. O como dice su director, Pere Navarro, «pacificar» el tráfico. Quien circula al volante de un coche ve al ciclista como un peligro. Que la velocidad se limite a 30 kilómetros por hora en el centro también le supone un inconveniente, sobre todo cuando las prisas empujan a pisar el acelerador. Para reducir la velocidad de los
coches, el Ayuntamiento ha instalado en las calles donde se inicia el recorrido cojines berlineses. Al lado, una señal que recomienda bajar la velocidad con una bicicleta debajo, y un cartel que establece que en toda la zona tienen prioridad los que circulen sobre dos ruedas (bicis). En el suelo, grandes señales pintadas indican que aquí se circula a 30 por hora. El circuito comprende, básicamente el centro limitado por las rondas, y la intención es que esté terminado antes del 31 de diciembre. Oviedo opta de esta forma por un sistema de uso compartido de la vía por bicicletas y coches, en vez de carriles bici como los que se están habilitando en otras ciudades, caso de Gijón. Allí, una vez finalizadas las obras actuales habrá más de 60 kilómetros de carriles bici, aunque faltan por resolver varios puntos sin conectar, como el Muro y el Puerto. Zaragoza es una de las urbes españolas con una de las redes más amplias de carriles bici, más de 120 kilómetros a falta de los otros 10 que se están habilitando. Pero la propuesta que surgió de Asturies conBici ya contemplaba que la implantación del 'Plan 30' fuera así. Su responsable en Oviedo, Covadonga Álvarez, sostiene que es la tendencia en el impulso del uso de la bicicleta en las ciudades donde se está poniendo en marcha.
El plan
Entre las rondas interiores. El perímetro entre las rondas interiores queda limitado a 30 kilómetros por hora y en toda la zona la bicicleta tiene prioridad. La propuesta de Asturies conBici pasaba porque en las calles con varios carriles se estableciera uno con velocidad limitada. Ahora sugieren flexibilidad.
La ruta
Cada viernes, Álvarez acude a la cita con la Masa Crítica que sale a las 20.00 desde la losa de Renfe. El jueves pasado, a petición de EL COMERCIO, se dio cita con otros ciclistas urbanos para comprobar en la calle la medida que está poniendo en marcha el Consistorio. Había previsto que a su llamara acudieran «dos o tres», pero el grupo fue de diez, entre ellos grandes 'abanderados' del ciclismo urbano en la capital, como Joaquín Arce, director de Política Forestal del Principado, y el catedrático de Derecho Francisco Bastida, además del profesor de Geológicas Ángel Rodríguez y la gerente del Banco de Tierras, María Hernández, entre otros. El recorrido: losa, Viaducto Marquina, Independencia, Uría, Marqués de Santa Cruz, Santa Susana, González Besada, plaza de Castilla, Calvo Sotelo, Marqués de Santa Cruz otra vez, Uría y Milicias Nacionales, donde con una foto de grupo junto a la estatua de Woody Allen el grupo se disolvió. Antes, intercambiaron sus primeras impresiones sobre las señales, los cojines y la actitud de los conductores al verles: ningún pitido ni ningún incidente, ni siquiera cuando el grupo ocupaba toda la calzada y, evidentemente, ralentizaba la circulación. «Es el principio del proceso del cambio», agradece Covadonga Álvarez. «Hasta ahora no había nada, y es muy bueno que se haga visible al ciclista», insiste Francisco Bastida subido a su bicicleta eléctrica, que utiliza a diario para ir a la Facultad de Derecho. Él y
los demás usan la bici como forma de transporte, con paraguas, algunos para cuando llueve, y con paciencia, todos, en las cuestas. Más del 90% de las calles tiene una pendiente suave, menor al 6%, y en Oviedo llueve menos (112 días de media al año) que en Ámsterdam (117) donde usan la bicicleta a diario. También sostienen que no hace falta ser joven ni estar demasiado en forma para moverse por Oviedo en bici. Aseguran que no es peligroso si se cumplen las normas de tráfico, que se llega antes que en coche a cualquier sitio, que no hay que buscar aparcamiento y que es un transporte respetuoso con el medio ambiente. Ahora, abogan por el siguiente cambio: «Que dejen de pensar que quienes vamos en bici es porque no tenemos dinero para ir en coche», bromean.
»
Comprueba lo que sabes
1.Ya conoces la estructura del reportaje.
A continuación vamos a transcribir uno publicado en El País.com en su edición para Cataluña el 20 de diciembre de 2010 por Helena Belmonte. Lo hemos desordenado para que lo ordenes debidamente e indiques sus partes. Está compuesto de ocho partes y ninguna está en el orden correcto. Peret tiene otros planes. No le da tiempo a hablar de los 50 años de rumba, porque le han dado una hora, dice, pero quiere aclarar unas "confusiones" que le molestan. "No puede ser que se confunda la rumba catalana con la rumba flamenca y con la salsa", lanza ante el público. "Estoy harto de ver a bandas que defienden que hacen rumba catalana y lo que hacen es salsa. Debemos empezar a llamar a las cosas por su nombre", continúa, en tono solemne, recordando a su época de pastor evangelista. "La rumba catalana es una guitarra a ritmo de ventilador y dos gitanitos haciendo palmas", explica el artista barcelonés, que dirige, desde el pasado noviembre, un curso de introducción a la rumba catalana en el Conservatorio del Liceo. "Venden que hacen rumba cuando están usando cencerros [propios de la salsa]", arremete, sin querer citar a nadie.
La rumba la empezó él
Más serio se pone a la hora de reivindicar la paternidad del invento. Al parecer, Lolita Flores dice que su padre, Antonio González El Pescaílla, fue el inventor de la rumba y de la técnica del ventilador. Para demostrar lo contrario pone un vídeo de una actuación televisiva de la década de 1980 en la que aparecen ambos. "¿Dónde está el ventilador? ¡No lo usa!", exclama triunfante. Y pone los puntos sobre las íes. La rumba catalana nació de su mano en la calle de la Cera, en el Raval. "Ahí vivían gitanos que escuchaban ópera", recuerda. "¡Viva el maestro!", grita una voz desde el fondo de la sala. Peret, Pedro Pubill Calaf, (Mataró, 1953), padre de la rumba catalana, entra en el auditorio del Espai Jove La Fontana para dar una clase durante la 2ª Diada de la Rumba. Se sienta, se pone las gafas y revisa un cuaderno con apuntes sobre la mesa. Algunos, guitarra en mano, esperan impacientes una lección práctica de ventilador (la técnica que consiste en rasgar las cuerdas de la guitarra y golpear al mismo tiempo la madera, a modo de percusión) o algún truco secreto del rey de la rumba.
Dice Peret que los que estuvieron manteniendo la rumba catalana, "porque un único hombre no puede hacerlo solo, fueron Chacho, Rumba Tres y Los Amaya, que luego los rumberos emigraron a América, otros prefirieron el flamenco y otros se pusieron a hacer salsa", explica. Con la retirada temporal del maestro en 1982, la rumba empezó a pasar de moda. Hasta que la salvaron Los Manolos. "En la fiesta de clausura de los Juego Olímpicos de Barcelona propuse invitar a Los Manolos, aunque cantaran en inglés, porque conseguían levantar cada actuación", dijo. Peret reivindica la paternidad del invento y pide que no se confunda con la salsa durante una clase abierta En la jam van a tocar la mayoría de bandas que hoy representan la rumba catalana, como Papaya, Chipen, Ai ai ai, Gertrudis, Los Manolos, Sabor de Gràcia, Barrio Negro, La Pegatina, Que pum que pam y Pantanito. El espectáculo empieza con Derrumband y un tributo a Gato Pérez. En pocos minutos no cabe un alfiler en el auditorio y la cola para entrar llega a la calle, donde están los más tardones. Pueden faltar compositores nuevos pero no rumberos. Peret no se quiere ir sin reivindicar a Pep Lladó, el ex pianista de Gato Pérez, aunque sean incapaces de ponerse de acuerdo sobre lo que es rumba y lo que no. "Necesitamos Peps Lladó y Gatos de muchos colores", dice. "Nos estamos quedando sin rumberos porque todos están yendo hacia la salsa", dice. "Los que llevan 30 años y no han cosechado ningún éxito ya no harán nada. Necesitamos músicos que salgan del Liceo, de Gràcia, de Badalona o de donde sea, pero que hagan verdaderamente rumba catalana", añade a modo de despedida, mientras se va alargando la cola para entrar a ver la jam session que hay programada después de la clase - Hemos destacado en negrita el titular, en color verde el subtítulo, en color naranja la entrada, en fuente normal el cuerpo del reportaje y en azul oscuro el párrafo final.
La rumba la empezó él
Peret reivindica la paternidad del invento y pide que no se confunda con la salsa durante una clase abierta "¡Viva el maestro!", grita una voz desde el fondo de la sala. Peret, Pedro Pubill Calaf, (Mataró, 1953), padre de la rumba catalana, entra en el auditorio del Espai Jove La
Fontana para dar una clase durante la 2ª Diada de la Rumba. Se sienta, se pone las gafas y revisa un cuaderno con apuntes sobre la mesa. Algunos, guitarra en mano, esperan impacientes una lección práctica de ventilador (la técnica que consiste en rasgar las cuerdas de la guitarra y golpear al mismo tiempo la madera, a modo de percusión) o algún truco secreto del rey de la rumba. Peret tiene otros planes. No le da tiempo a hablar de los 50 años de rumba, porque le han dado una hora, dice, pero quiere aclarar unas "confusiones" que le molestan. "No puede ser que se confunda la rumba catalana con la rumba flamenca y con la salsa", lanza ante el público. "Estoy harto de ver a bandas que defienden que hacen rumba catalana y lo que hacen es salsa. Debemos empezar a llamar a las cosas por su nombre", continúa, en tono solemne, recordando a su época de pastor evangelista. "La rumba catalana es una guitarra a ritmo de ventilador y dos gitanitos haciendo palmas", explica el artista barcelonés, que dirige, desde el pasado noviembre, un curso de introducción a la rumba catalana en el Conservatorio del Liceo. "Venden que hacen rumba cuando están usando cencerros [propios de la salsa]", arremete, sin querer citar a nadie. Más serio se pone a la hora de reivindicar la paternidad del invento. Al parecer, Lolita Flores dice que su padre, Antonio González El Pescaílla, fue el inventor de la rumba y de la técnica del ventilador. Para demostrar lo contrario pone un vídeo de una actuación televisiva de la década de 1980 en la que aparecen ambos. "¿Dónde está el ventilador? ¡No lo usa!", exclama triunfante. Y pone los puntos sobre las íes. La rumba catalana nació de su mano en la calle de la Cera, en el Raval. "Ahí vivían gitanos que escuchaban ópera", recuerda. Dice Peret que los que estuvieron manteniendo la rumba catalana, "porque un único hombre no puede hacerlo solo, fueron Chacho, Rumba Tres y Los Amaya, que luego los rumberos emigraron a América, otros prefirieron el flamenco y otros se pusieron a hacer salsa", explica. Con la retirada temporal del maestro en 1982, la rumba empezó a pasar de moda. Hasta que la salvaron Los Manolos. "En la fiesta de clausura de los Juegos Olímpicos de Barcelona propuse invitar a Los Manolos, aunque cantaran en inglés, porque conseguían levantar cada actuación", dijo. Peret no se quiere ir sin reivindicar a Pep Lladó, el ex pianista de Gato Pérez, aunque sean incapaces de ponerse de acuerdo sobre lo que es rumba y lo que no. "Necesitamos Peps Lladó y Gatos de muchos colores", dice. "Nos estamos quedando sin rumberos porque todos están yendo hacia la salsa", dice. "Los que llevan 30 años y no han cosechado ningún éxito ya no harán nada. Necesitamos músicos que salgan del Liceo, de Gràcia, de Badalona o de donde sea, pero que hagan verdaderamente rumba catalana",
añade a modo de despedida, mientras se va alargando la cola para entrar a ver la jam session que hay programada después de la clase. En la jam van a tocar la mayoría de bandas que hoy representan la rumba catalana, como Papaya, Chipen, Ai ai ai, Gertrudis, Los Manolos, Sabor de Gràcia, Barrio Negro, La Pegatina, Que pum que pam y Pantanito. El espectáculo empieza con Derrumband y un tributo a Gato Pérez. En pocos minutos no cabe un alfiler en el auditorio y la cola para entrar llega a la calle, donde están los más tardones. Pueden faltar compositores nuevos pero no rumberos.