Elia Y Su Clase Van De Excurcion 4z1i6x

Elia y su clase van de excursión EL BABCO

Timo Parvela

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Ll bc[,[ dcl ¡,r oltsr rr r,¡lir d(sp].1r(, {Áurnl S.rnri ¡ Tiin,r. -Lrr la bolsr rfut¡roltsor vr r srlir rr dr«, -lc dijo Tiin¡. l,¡utr ¡t oíJ,) l¡,é ¡rd.iis cú.rri.hculo IU g¡rtórlprottso¡ ¡ l,¡uli.qrr c,.¡ rl l¡ lil¡ -¿Lo pücd,J ¿r.a

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-¿\' l(rs¡Lrá cl profc, frcgu¡i¡. Nos drbr l¡ ris¡ do de r¡s¡r or l¡cr¡¡dcl

¡rofi«,1euando algiur LIir sr otcrrrr. Ertoncts lltg<, cl run)I,í,s. Ir.r .Dor¡)e ntcn¡c gr.,n.tey.r[o SÍr cDrbrr8,,cl (n.[,cnrr c,,¡ cnonDcmcDt( pcqu!ño. gordo v b¡rbudo. rU sobia lhnm ) \o cch¡¡ros un \ isr¿zo ¡ \u

4;\

baffiga.Es¡baclirisim)qucclpról¡« ¡ocra cl úDi.!.}uc ib. r rcncr u¡ niín,. -Todo

lis¡¡

¡runcr-, h mujerdcl prolern:

-¿q,idcs dccú qú(odos.sr,i, .1dnrc

n.¡6,

el prcfcsor ,rcs

PrcSu¡ró.

¿Tch¿is to.los vtrcstras

dc1

autobús y bicn scnmclios en sn sirio? -pk Suntó. nrcródulo, el profcs, . -Carióo. no re pongls ncrvioso.Los !c co¡De rodos

-¿Te¡éis rodos dfietu?

vollió n .1,L

¿L1e\,áis rodos la

merienda,

¿Bokas pa¡á el ma¡eo y beDgalas de emer-

2 EN Er

aurosús

Entonccs sí nos quedamos sorp,eDdidos. Cariúo, trxnqu ilízatc y siénratc ya -le pi,

-lnconcebiblc. Esro rienc qu murmr¡ró é1 al sent¡rse cn su srtio. "Podemos irnos,.le indicó al conducr¡ pequeño y gordq y elautobús se püso en marchi.Agirando la m¡nq nos despcdimos dc la escuela y dc la bolsa del profcsoa que se habÍa

qrcdado eD mit¡d delpario. ¡Qépena e1 ccrdito! -cxclamó

,\ TuoM^s sE r.E ocuRR¡ó ud iúcsoemocion:nie,.urñ.1ó viémmos un tr,.tor. knixmos quc ap.eta. u"" d. Los botor)cs roios que h¡bía or cl tcchodcl ¡utobús.Se le da bicd !)vc¡rar

ltuli.dc -¿Y qué pasa si uno no lLcga hará el trorón 2 sc prco.úpó P¡uli, ql,e cs cl ñás b¡iiro dc l¡

-E¡ronces se pued. dccir .piiiiiir. Al principio nadie vio ninguD tractor po¡que todavia estáb¿mos en l. cnrdid. Pero ram ooco l¡era de l¡ ciudad se veía¡ ¡ractorcs. solo había boqre. Y cuando se acabo el boque, vino orra ciudad dondc tampmo h¡bia rracrores. iQ¡¿ calladiros estátr! 1e diio ¡1 profesor

I'Lr\fu¡ \ \.1.r\ 11, .\r tr(l!, ,r, i,,k nr,, I,.,\rnr.\ r, r)r,l ., ,L¡¡ i:,bi,,.) ¡, run,r.i \l ¡1f,trt .\ n!1,tr ,r^ |.,k.ii) ú¡ i:,{i(lii,,I r(lfioii,,r iri\tr,) ribi.i,.,¡1,,,u,i L"r('rI 1,.¡1,r, t.(ti,tidLl fr /.¡r r tu,r.l .¡ (!nrl r itn( \ l,lf,(i\r¡r, (lfr .,1¡ ( r( .l l,{,¡r rL .,t Li rL.l \.,., h.,.rr.l,r{¡ J.l\ iL r .,i'.lL,rtt, r,,.,,,,. L

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ru.rn¡o.l nos.r»d,¿ú r{,¡ \lrJcúu.,, (l nrÚ.a.lo Je g¡,rr.lo S! rl!:, nos p¡rcció,itsr '¡ porquc cn ,rqL,cl m(,c¡to s0t,¡ sr vrn

Jí,¡¡ y¡L¡s.,\

!..c\!l f ,.lisor.s!,.r.n\¡inr).

lL\rr ¡l .o¡.lurnn lr dúra) l.r iisr. hnnr,t,rr c.sirolc¡n,s vrat:¡os., h ru,,u¡ Ilur¡rr. el rr{o del !irjL no ,)(!rri,t rin

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I,¡n.r \omir{l do\ !ú(* |,n(lu( n. h,rl,í¡ z,nrp. oc.§i«¡l.N hs r¡xni,rlx\ \ (lo\ r¡1)1.¡.,\ .,. 1

(l..ho.ol,u..Sú r{r¡uo (.,,i¡ u,r col¡r cl¡uhsi ¡r).pr.sunrs & (\. tirnn.§ tu¿r htr.er fl\.LLr¡o\c.t\v Iriuli r !u.d(l ,u¡..&]i,.¡ .l ¡:i.,úo lu{o.!.¡ o LlcsÍldos r,)ucf o dc*i,r¡. IoJos fucrr rlcl ¡u«,1.ú; o.,L{ó.1 t)¡.1 t.r,r. \ ttn,s lc obrdc.l n¡,r trct¡rr Pru tL. .pc \(süí.¡ ¡rr¡p¡¡o d, n, ¡\i.ne,. 't-uon]tr§. H¡n¡.,.sa.r, \ !o r(gr(s¿h.\.or

rl ¡rotl*r

al

rutobúsprnsacurl'rrli.

,Poo cr¡¡o tr h¡s c,¡r¡¡c1,.¡lo.rLi, -i! soryr., rl kr cl frf!§oi m (r¡, ¡\ r r¡(¡b.r ¡r d

ti(Ú..1( |¡uli,9ur h¡ti¡ gucdr¡otrl prJr rrrrL. rl Lr.¡rl.lo r cl.riu,n, r,¡, l,¡

Nosorros e lo demostnmos y. claro, nos quedamos aüapados igual que Pauli. Smi se echó ¡ llotár aando el p¡ofesr dijo que nos dejuí¿ aIí, pero lu€go Dc scó. A veces, el PI¡> fesor es nuy poco decidido y no sabe lo que qDide.,usto omdo habia conseguido sacarnos, su ¡eloj * le quedó ensúchado en uno de los tornillos del asienrq y tambiéD él se quedó atrapado. Al final ruvo que subir et conductor y desatornillar todo el respaldo del asiento pda libenrle, y la cosa duró butante porque el onductor no paleba de rense. EE un hombre con mucho sentido del h¡mor Rsuhaba diffcil saber si el profeor también se r€ia ranrq porque había húddido la .ara e¡ el asientq así que Hdda y yo decidi mos a¡ime¡lo diciéndole que pronto tendría

-A mi me parece que el profe

ilora¡ s

IN

EL NEsTAUNANTE

Cu^NDo LocRAMos sacaR al profesor del aurobús. fuimos a com6. Ya teníamos u¡ hmbre aroz, y seguramente tanbién el profesor y su muie¡ pero por desgracia su dinero esraba en la bolsa quc se había quedado olvidada en

-¿1bdo el dinero? -se aseguró la rnujer del

H,s. elúlim6.énriñ6 -¿Y las tarieras de crédito?

-La merienda,la dcument2ción se

ha echado

so¡pr€ndió HanDa. -Son lásrimás de €moción -aseguré. Era estupeodo poder darle um alegría. a

§3

tola

I

la pis

enumeró el profesor. -Y el odno -añadió Pauli. Por suerre, e Há¡na eún le quedab¡n dos gominolas qu€ no habia tenido tiempo de comerre mtes de rcmitr. Le enrrego um al profeor y la orra a su múi( Háma es una io!á.

-l¡¡icrcs Lr a¡)¿rLLr o l¡ roj¡ / frt,run"') l¡ ¡N j.r.ld prfc$r. h ir.rLi¿n.s un,¡ lo\.r. Y ¡or su¡ue*o cl ¡ mlcso,r L1u( ¡!ó (lu. r nru conucLr rmbos crLrrchr. Uoo prrr ti,votro ¡rrr tllthú. Ire\ un.¡ Luc¡a p.r(,rr (t,¡,.ll¡ xfo rÍrl{rscc¡ sú homlJro. Noso¡r¡s L.rcc,c.rn¡s uorsrlh,ptrocx¡licrlqucscrpol.rb,r rn t] ptolN)r lorquc lc q¡cr,. ¡nr.ll,. Y co¡r, ¡ov, tros r¡mli¿¡ lo quc,ir¡n,s r¡urk,.fur\ cnsc-

ltr

»o¡ ulos

hiios

s,!o\?

prcsutrra,.l s.iro,

Nucstros,si rsiutr-,tl proftsor.

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gurh rrr rcco*rnrx cn úl.lir (r.r.i{rn)!n.L t(dos ¡lli.cn n\iio drl r(!( rurr rt. r¡olrdos ú,.1pnni!)rr\I.or ¡úor Ie rnú,¡ h ¡isr,s. rci¡ rrrúo quc cru\()., p,rnro Llc,n[grnrarsc r

-1'clsiguic¡t(ri.D.dc.¡¡rino rrpi(lrl prcfcsoL dando unr prhrtlLas cn h brrrig.r El sciror dLl rcr¡ur¡nt sc ¡¡¡rclta¡ nqr¡do Lur 1¡.¡Lcz¡.fc,o los ¡n Lto ¡ emt¡os ¡ como l'robrblc¡r.n(. por rnr conrcrtir tl proEl scñor dcl

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frcgun«iel nño,

IJ¡oD¡. l'rra m;.cspágucri pidióTrx,n¡§ Esp¡gucri -.nu nció Sirn i. -Pü¡ nri..lgodccomÚ diio l,ruii. Así guc s¡l.hich¡s oú N¿ dr prtura irió rl {ñor cn n¡ lil,rc¡¡, k ¡1uhó ¡ l¡ ,v pidn-)

rrc haohidrdoprclir ur L(ücsco dijo l'ruli s¡llrndo dcr¡ás dc ¿1. i'¡uli t"¡¡b¡ |,usc¡nJo ¡ u,r scóol tcro se topó co¡ u¡a se.x, r gnn.lc ), coloLada quc llcvrLr ur cxtreño¡¡orro bhncocn l¡ c¡l¡cz¡ Se

-"ELtsrúclavudartt? lrLgunrór |rtrli. Soy l'¡uli. I'uc\ ñc csprreba a.lguicn nr¡t, -)h crcccré rlgún dh ¿scsura) Pauli. Cicto -añid iar Ia sealora .ol(rada, r lucgo lc fu$r I'¡uLiu¡ gor¡o.i!r más raro qurtlsurrr

Túom,s

se

encontró un molde para hacer

.4

galletas.

N¡vidad. Sámi se edco'tró úá escobilla para limpiar -Pero si no

es

-Yorambión qDiqo un ñolde para galleras Jiio echándose a lloÉL Smi nunc¡ srá con Yo enco¡rré unas tijeras.

¿Me las prestas? -preguntó Pauli. En su plato babía puré de patatu y un paquete de sal-

Después de que Pauli abriera el paquete y de que Sami y Tuom intercmbiaran lo que habian enconfado, ródos esrábamos contentos. Aunque há5 coqrenrc ¡odavía se veí¡ a los disimula. He ehcontsdo o la sals úna ñoneda de veinte y ua de cinco céntimos

-Ceiñq

-l€ dijo et pfofesof a N nuier el oído, y lueso sonlió misteriosame¡te. Pues yo tengo sesenta cénrimos en la boca

-ssurró ella suiñándole

e1ojo.

t-o s¡curENrE de nuestro prognm er: dte El ouso era un edificio grande y deganre. El profeor nos había hablado sobre é1 y sabiamos q"e estaba lleno de cuadros fmoos y de esolrurd ñúy bonnas. Una visira al murc form pute de la culrura genenl. Fue una Pma que no püiélamos entra¡ porque los profesores no enían dinerc para compm! ls entradu -Una ent¡ada de ¿dulto cuesta dos eu¡os

-diio la señora -Pero

de la caj¿.

es que Do

-El dino erá

togo nás que

en ia

bois

esto

Y la bolsr

en el patio del colegio ¿compre¡de ? el prolesor en roz muy alta.

-splicó

*

quedo

-eaPlicó

CoD

)

elcddi¡o

¡ar¿.1ñ l,auli.

\i r.,,¡ bus.¡r.sr b(J\r \. l.r ¡i.r ¡qui2

Y¡I

.crdiro -.ontnM-)

|r,li.

IgnoLutc rljoclproti-vr r hseÁoLrmicn rr.r Lttlgir tl dircro Lltl rtosrr.do,. al,,rúo ¡no¡tths dc r.cint.'v unr dc .nr.o.¿D(n¡os a h quc sc lc hrl,ir qucdado ¡egr,1o rn tozo

¡q,,i noJr..lu, rr¡r,.,ni.r.rl$ ¡Jyir ¿\ .a)nx,11r!.r ir ¡ bu\(¡¡

l.,b.l\.r?

scsor

Pucs¡11¡nrlo fh¡Lso l¡ srúor.,. Lsre.l no

cr,i.¡

sus.¡bxlcs

-di,.Jrlpr.

(hrianr, i¡r.¡L¡ co¡rpoúr, ¡c .iyiliz&l¡ mortc -p ió h nupL dclproii«t

?':*

ur rromir

rnscrplcócn ioz.rlt¡sc¡rLr¡Jo¡ l¡sc¡o,¡del.i.¡j¡ .L.§ ¡io¡ri¡s ¡. ur rxr.r¡n,r¡rr tre. pcro.tlcsdc EstrJcaqui

cs

lurgr', csu lorma prrtc dcl muco. -\r.ns¡.v¡nnÁ Jijo L.r nruj., dcl

frctr$

on l¡.¡,i dúrn¡n.ntu«)h,r¡J¿.Et¿ c¡si del nri'm,.oloL qu.l. dc l¡ sciror¡dcL mu*o. -]\rtc*ro ¡lrcrltdor vc¡s 1¡ e¡¡¡dr dtL nrs.o.Po, dcsgkix

no

\ris r

¡r

rr vcr

n,ás.

po¡qúe ¡adie se ha arrevido a desafiar la maldición de la úomia expli.ó el profesor Aquello era muy emocionante. Qyé geniat pódtr ver úm momia- Una ñomia vivá, y además gratis. Todos lá obser!áños con xten ión y no nos fijamos en el serior que re acercó para aconpanar r1 profesor hasta la salida. Lo 11evaba bien suieto del bazo, segurmente por si cl profe k resbalaba po¡ 1as escaleras. ¡Qyé educado eral De.idimos imir¡r su eieñplo y no agarramos del b.a.o de dos en dos y des puá següimos al seño¡ y al profesor Íbamos todos derás ñedos le ñújer del profera que se había adelantado y había subido al autobús Si csascñóra erála momia,¿qui¿n Ga seno¡

cl

/ -preEunro r'¡urr.

Era el marido de la momia -supo Hanna. -El faraón -precl!ó Túom¿s,que lo sabe todo Pcnsábamos gue el profesor ¡eoía razó¡. Visitr el museo formaba prte de la cultura geneml. Ademtu, habia sido nuy emóciona¡te.

.5 Er zooróGlco

DEspuÉs DEL MUsEo, fuimos al zoológico. El viaie duró bestante porque el conducro! se equivocó de cami¡o varias veces. Como no paraba de reírse, las Iágrimas eD los oios no le deiaban vc¡ bien la ctreter¡. El oDductor era una persona muy alegre. El rcológico ca enormc y elegante. Estaba lleno de animales raros y exóticos El profesor nos h¿bia hablado sob¡e él co¡ ante¡ioridád. Tembién una visira al zoo fonna parte de la cultura general. y casi no podíamos aguantar 1* ganas y la emociónI¡ siento diio también el señor de la ra' quilla del zoo oando el prolemr le mostró el

,linero-.El billee

de

adulto cuestá dos euro§.

3:"1

tT-4 §

.$-

J[úo

cs¡i cn h dichos¡ bols¡ ¡r úrmu.ó .1 protesor c¡ ¡ c .tic. rcs.

-rc.o

cs

quc cl

C,n clce,(lim -¡¡¡dió Paú11. ¿Y nopo¿ri¿ ir rLn,s.rr h bolsr 1'.,1

r-

¡r¡e,1.,

r,¡relmstntlor

L1c

LU¡¡

(c,(llro -iñ¡dió P.u1i.

l-os ojos dcL pn,f.r,r sc súcch¡nn. Nos¡ tros .ontNnnos el ¡ licn¡o. r\ rodos nos prrccir quc a¡render cultuLr gcocnl cr¡

gritrmos rosorlos. fl,es x csis ¡hrr¡sYa nos \rbi¡¡ros l¡s Éplcrsde mcrfurir. Niixrs.r\dn iDr.l qui¿¡ csri s.¡ údo .1.¡ ís

-;,\ndrndo

nr!ni¡l

prtsu¡tó. rcsLrondn¡os, pcr. elfro nos

ic«r ncgó con la crbcza. l..s ¡nn¡ies es¡in cn ld ¡n¡sco\. Ahor¿ cra,nos cn un zoo.¡si quc cso dt ahi es cl¡¡r

trriblo¡cn¡e

/YcaDo\N¡ ii ¡ bus.¿r li bols.r?

siscó

Lnidió ¡Ncl,o

no srLcrquéo

$i¿¡ cra cn rer[hd cl scñoL dt h taquilh.pucs ¡rto or §"os

csc

m»cro utcrvno h pLofc*rr.

-Cariiro, dci¡ quc yo hc ooryc pu¡anJo coo tcrnura

-dip tor-

rI¡rolcso,-. r"rños,lor

N¡n¡mlmcntc ol¡cdtcr¡os, a e¡ fi la ¡o cr¡, p¡ tu.1¡. ran cnú.i,nr¡ nrc .o¡ro 1¡ Ncrtur¡ cD el D\§c!. l,ucgo tros m¡¡da, quc .onifrár.n¡os Lm¡ cntr¡dr cx.h ü¡o. r,¡s¡d lL¡ birn cr rl zoo ¡osdcscó.ú¡¡do todos ¡e¡i¡,¡osun billere. -Un mo¡rcnro r)t.rruhrpia) c] \c.x¡ d. l¡ ¡¡qu1ll¡ .¿Dc \úd¡d !¡ ¡ dci¡, {¡clros.(nos? Nos mira).on desconli¡rz¡. Pruli ¡ rir ller$,r ¡ue«o clgorc dr cocnrcn). S.nn i .strbr agrclhrlo hrciordo gr llcr,¡s dc ¡rcn¡ co¡ cl

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LotcLL¡s

oLprcndió h mujcr dcl proltsoL- lidos ticncn su t¡rrid¡. Niños,cn' scñ¡dlc yucsrr¡s co¡r ¡das i c{c scno,: Agitrmos hs cntrtlas cn cl.irc.lidos nrc Dos P¡ul,v vo.lb n)str¿ 1r rstri ¡. ¡mii..os rccort¡dos.v 1¡ cotr¡da clc I':uii eLa ur gurru i,o mojrdo porqut h ireLia Lsrdo¡au h,rccrst !¡a ¡rnró¡ica o¡ cl tc¡r.. H¿Li¡ csrado rocando los¡a7a,ror o rl mrnos e<, * lo quc él.lccia.porquc r uosotros Dris btr nos ¡rr c -¿Y ¡orquú

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-Pero. pe!o... es que esto es un zoológico puede andar .oÍeteando -objetó e1 señor de la taquill¡. -Bueno, sesuro que encuotmn alguna Éula lib¡e -el profco! se inmimyó en la convssación,y luego se calló cu¿ndq por eror, su mujer le dio un pisorón el pie.

y aquí no

se

s6 Los aNIMAtES

o

Nosotros los acompáñdiamoi pdo como no teoemos suficiente dinero..

-¿Cuánto dicen que renían

-dijo ella

?

Ochotáy.inm.éntimos .lprófeorpuso el dinerc obre ef mostr¿dor

-Seguro que con esto llega. El señor recogió las monedas y dio Dná ed -Cracias. El trozo de espagueii eg¡ade.ió e1 Fofesor Ento¡ces e¡ramos e¡ el zm.

se 10 reB-¿lo

EL zoolócicoerá ún sitio genial. Eñ la primera jaula habi¿ mucha h ie¡ba. En la segunda. arbustos altos. En la race¡a había rocas y un neumático viejo.Y en la drarta vimos incluso

-Tiene una jaula basmnre giande esrimó

-No

es suya.

bu¡ro -obseNó Tuomas.

-¿Eh? ¿Dóndeesrá el burro? quiso sabú Pauli. -Qye no hay ningún burro -di,o Hanna-.

letero pone .leopudo de las ni*es". -Pues qué pequeño -se srprendió Pauli. -Pero ruel¿ bastante bie¡ -áfirmó Sami omdo el loprdo de ls nieves se p$ó a roda velddad sohre una nmz. Eo este

Los

!i por últrni \u

cü L ixul¡ dc l,)s

nx!

il-.s nx,ms los hrn hccho písroocrosl .&no \a'nos I distmrui, ¡ csos dos t¡¡r. rlgrufo dc ¡anns? -sep¡cocupócl prolisor 1Y

ic¡¡1ñor l¡muid.lrlp¡f.torlcr,e¡di¿) r sr rlispu$ r oLgrnizrr grupos Llc búsqucdr. Aquclloc.¡..si r¡r cmocion¡ntc comd or .uorro.on li n!,ni¡ v cl i,m(nr c¡ elnn¡seo. li¡nnr v vocmlczr¡o\¡ Lrus.., e¡ li zoi¡ dc L¡s o¡s.l.os osos ac¡L¡at¡ar rlc comcL v pr

rccir¡

sosf r.hos¿nicotc

ltislcchos, ¡tro

cui¡l¡doL¡ dc ¡nin¡rlcs nos Lrlirrmó dt quc csc rli¡ h¡L,i¡¡ com«1o licbrc.¡'i q¡e tLn únos qüc continur h Lúsqucdr. Los l¡¡bos st.Ll¡¡,, dc¡n¡si¡do n¡cos. El ri noro»tc si cstablollizo.¡crc rl prrcccr soLLr comir phntr\.Il 1l.g¡r iur ro a los ¡nns,1 I¡nr¡

! lodnd¡mos ün ¡oL1,..Ysi,¡r¡oc¡ clcuc¡ri, Jc l'¡,,1a.S.¡rl ),1'. ,list h¡l¡i¡¡ com,ú¡do cnb,¡)s?r\lfi¡¡lJcs.¡rt¡nroslaidc.r¡orgur asnn renirn rs¡ccto ct str.1c¡r.si¡do lisros. Adcmí.1]r¿foes *no rn cncn¡¡ Los

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¡ul

ors r¡hus Los. dos grandcs rocas,v PauIique,rdemás de lrx c¡lzo¡cillos, solo llcv¡l¡a pucsto cl gorro de cocincro. Ilres«¡ dc su ro¡acstrbr amon

ro¡¡¡¡ ju¡'o

j

a Sami, quc es¡¡t¡a iL¡cra de la

h. \os c.lhmos ¡ r.n porquc 1os crLzor cillos dc I'auli ¡c¡i¡¡ eldibu¡r dc un «)lrck. lVcngrn y rcrnl Un honb¡c s¡haic do"

cl,ro gritxb¡S¡ñi. Sov u¡ l¡rión -chilló I'¡uli.

mcstiQdo, solo por un

-De eso nada.

V¡[.pms ú¡ hr¡ón.

¿Sc lc

¡uedc dar

com r? ¡,cgunúun

pcro .r nri si .onrc*a, S¡ni ¡l lltarsc bolsa rte carunclos qut Ilcr¡l¡¡ cl¡,ino.

-ñr or h

l¡tcrrs¡¡rc. ¿Y cuil ts $ roDrbrc.icnti flco? -qui{, s¡L.r úm sciro,,.

P¡uliNienri

rcspotr¿LóSani ¿'\ qu¿.omc? -p.egnnta) !l trino dc los ca Dc todo nrcnx cltchcs. ¿)' tiorc cncorigos cn l¡ ntunl.za? -con

-Y

el

cerdiro ¡ñadió

Pauli, a quien el profesr manrcnía sujero por el aello. -¿Q!é .eldim 7 -se interqsó e1 señor del -El que esrá en ta bolsa -explicó pauti. ¿En qué bolsa? -p¡egú¡tó el señor. -la que está e¡ el patio del colegio -precisó Pauli. El serio! del z@ miró ,1 profesa que asen-

"7

tía con la .abeza y sonreia. Luego miró a Pauli,

EN

hd

que empezal,a a tener carne de gallinapor el

f¡ío. -¿Pero qúién se v¡á come¡ aquía quién? -prcguntó ei Diñopequeño, que mie¡r¡as tán.o le h,bía dado rodos los cúáhelos , s,ñ i -Okideños la multa -dijo el *ñor dando al profesor unas palm¿diras en e1 hombro. Al final. el profesor no estaba ran enfadado coD Pauli y Sami. Incluso ¡os invitó a un6 he lados al r€cibi¡ Ia mirad de1 dinero que Sámi habu conseguLdo al oroladodet¿ r¿uta.Et

¡LvratE DE vuEl-r¡ )a nopasócasi nada. Sami rcmitó porque se había puesto morado de ca¡amelos en el zocs¡ vómito era ñeior que el de Hann¡,era nlás colorido.

-Perc es que a Smi lo aludó el niño del zo -co¡nenró Hann¡ quitándole importañcia. A Tuom¿s se 1e ocuffió que, con la ecol¡ill¡ para limpiar botellas, podiamo hácc .osqúi' llas en el cuello al de del¡nte. Pauli cambió el gorro por el ñolde de salletas y Hanna me hizo on su num peine un pei¡ado qDe quedó bdranre chulo porque se le queduon pegado pequeños üocitos de esp¡gueti. Los profesores estaba» conre¡¡os porque, despuó de invitarnos a helados,les habían so,

-Con esto poáemos comprarle un chupete al bebé -sugirió la mujer del profesor

..8 LAs NOIAS

EN LOS ÁRBOLES

O únas peqüeñ* espoes -propuso el pro-

Ca¡iño sonrió ella,y volvióa recosra6e en el hombro del profesor. A estas altu.a,, ¡a sabíamos que se apoyaba en ól porque le que-

!ia. Nosotros tahbi¿n.

Al final delviaje,el conducror nos dio las gracias. Alirmó que se había div€rtido más qúe Le envidio.Tiene usted un trabajo muy divertido -le dijo al proresor ¿Alguna vez ha pensado o haftlse faquir? Seguramente re lo pasaria bomba; alfombns de pin.hos, carbón ardiendo y todo eso -con-

C{iño... -$¡ mujs se lo llsó al pario El profesor se puso ñuy contento al encon-

tru

su bolsa exactarnenre en el mismo lugar

donde la había dejado.Y con todas Pero el cerdito

Panli.

*

1as

cosas

ha escapado -se lamentó

Ya HAsía p^s^Do uNA sEMrN¡ desde la e¡cursión con la clase. La fiesta de fin de curso habia terninado y todos se habían ido a casa odevacaciones.'Ibdos menosTuo¡n¡.H¡nna. Pauli y yo. lntentábamos b¿jar a pedrad el certificado de notas de Pauli, que estaba en Ia

íbo1 que había en el patio. -Con cuidado: Do quiúo que rensa aguje ros -se pnmupo Pauli. copa de un gran

Pues haberlo pensado anres de hrcerte u¡ avión con las notas diio Tuomas-. Tal vez baie por si solo, oa¡do se caigán lás l¡ojas. iED oroño | -.hi11ó Páuli-. No Puedo esPerar hást2 el oroño. Y ñi madre tampoco. -¿Y si le dices que al p.ofe se le olvidó en'

ttegarnos lasnotas? -se le oorrió a Hanna, pero Paú1i negó rristemente co¡ la cabeza.

-Si nri ¡radrc ro se.rcva, €s¡ úol¡ e¡ NalL dad,lpor qu¿ iLr a.¡cérsela.hor¡7 u¡a asradal,le trisa b¡lxrccxb¡ l} nmas drl ár'bol. pcro c1 rviór lt.ho con las nort scguia bi.¡ Urmc cn su s,¡io. Por mucho que ñiráb¡nn)s hacia ar¡iba con.l.ucllo cri,¡do, ¡ ningu¡o se nos ocÚrir un ph¡ para coDs.guir b¡ldr lxs,ntris.si no se cucor¿ 1. rlcr d€

r!larel árbo1. -¿Q¡éandásmuardo? f.esunróunavoz fanLli¿r dcüirs de noso¡ros. Ei profc evrba P¡L,li de

a nues¡ro

hdo

r

csrrcclul¡r

l,r

o¡)s para

\rr

qué obscrvábamos .on ian¡¡ areDcia». t1)r *ctc.no llcvabr las gahs pucstas. Lrs nubes dilo'tuomrs.

Pájaros diio Ha¡na. L¡s n.trs diió P¡uLi. -Esreárbol es unabedul e\pli.a,el prof¡ sor . En csra zom hay dos ti¡os de abedules: eL abedul «)nÍn y cl abcdul árti.ó. Este cn co¡crero es un... A),, pero siv¡ es¡oy de \ac cio¡.s rccordó dc pronto. ): dcscándo¡os u¡ buen

rdar, f mrchó.

-Utcsturo coo {'sf iró l larna. Dcsrt h vc¡t¡n¡ de nucs¡¡e cl¡sc ¿lc¡n zrrixnn,s ¡s¡cudir un¿ r¡srx su{rri. Losdcntás scilLr¡ro¡

p¡r¡,nir¡, v c«ulir

ro¡ ic ¿.ud.l..Nuc{,¡ clasccraL¡ o 1¡ pri mcmph¡r¡.a la DrNr¡¡ ¿ltun que h r¡nra cn l: tluc sc lubíar qucdado rt¡sc¡drs l.s ¡oris,

quc.¡sito.¡b¡

1¡

rnm¡a

Justo cn cse mo¡rcrro vinos r Srmi. quc Rrs ¡b¡ dsdc N¡nr¡lmcnrc, lc dc \oh i,ros cl saludo.l-ucga S¡mi sc púJo a d¡r s¡l¡os v no«¡ros le ¡¡r¡aors.,\gurl ¡Es¡) enr-

ul!

¡ezaba r crmrrnos

d¡r

ru

poco

cu.ndo.d«,to,

{¡e.u¡br¿.

¿Q1é hecc ¡hídc¡ro? ¿Y si sc hx quc¿¿do c¡srig¡¡o?

srglrió

I'}.¡sáL¡mos qú.cra n¡a lásrim¡ quc S¡mi p¡"¡r¡ bdocl vcnDo.¡srigado cr chsc.pcro rcnir que hrber sido más cuid¡doso ¡L mos

t¡i

có,nos.l¡¡za uD ¡ntilloo habeL dc¡do l¡ .:Lnrl dd pd¡sór úr p¡2. Dcc nos quc ¡ i¡,¡os a s¡ludar lc una vezr hscmrr.Segu rarnotc. cso lc alcgraria. Dc Lc¡enfu. Srmi roirió r rptccú dctr:rs dc L.¡rcnr¡¡a.ll¡ I¡ n¡a¡o llsrbr clpürccldc 1as rcurrchs vor grundcs lctr¡s roj¡s,escri-

uÍ

jjl,: @

§:

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-El prolcsor Ic habrá pucsto debcrcs rlqo 'luo,nas,qrc noruulmente lo sabe todo. ¿l'eroquéponc rhi? ntcxtrané. -^duy¡ -lc,vó l'auli. scrvi.i¡1.

¿El qué?

lAduyrl grtanos

todos al unisono. e\trxíro .luc Sami ¡o sc

Nos parcci¡ ¡rlv .rcord¡ra dc 1o qu. ac¡b¡t ¡ de c\criLir -Escuchad' ncccsrto ryuda.\o pucdo sa

-Vamos r ptegurtársclo sugirió Tuom¡s. v todos lcgriramostpe

abric¡ hacdt¡¡¿.

¿(¡1¿csloqüchasescriro? -preBunté. -¿Peroesque¡osxbesleer? scso¡p¡e¡dió Sami. Si ql,e s¿bcmos, pc¡o ¡o e¡terdemos qué signilica Aduya a.hró H¿nnx.

enÍó le ísa. Le explicanosquc cl obict¡o.lequcdarc crsig¿do en clase es,preci Nos

srmente, no poder salir. San¡i se echó a llo¡ar e i¡sistió eo quc no cstrba casrigado, snro quc sc habia cluedado c¡o¡do.lu«o e¡roncs nos acoLda¡ros de

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li, Sani sc es.urrió por h vc¡tam y sc quedó colgardoco¡ las nranosalernd$a la ran¡ v solo los dcdos dc los ples aporados e¡ elalléizar .l'rr qtLéluhcchocso? prcgu¡tóHa¡¡a,

culo en u¡a ram¡ c¡si ta¡ alta como la.a"., ¡ la quc cn u¡ t,in.ipnr sc h¡bii r¡jcL.do. G,mo cs lógi.o, aplaudnnos. No tenia¡ros 1¡ mcnor idea dc que Sani supicra n¡rrarta¡ bie¡

S¿cúdc1¡. In¡e¡ta sacudir ¡hora la rrma

HazL,otr¡

-eritó i'auli. t^yud¡ I -chilLó Sami. Yasé lo qrc poneen la renta¡a -erclan¡ó

Ii¡om¡s,tdo no r!\o tienpod..xpli.ár¡oslo porquc, dc prorto,los pies dc Sami se sepr nr» rlel rlf¿Lz¡r. Ch illa¡ do a ¡odo pul¡rón v abrazado rodaviaa la r¡m¡,Srñi s. colLú¡ pió

hrta

cl otro lado del árbol y arerrizó de

rcz pdó

P¡uli. lcro Sami ncg¿) fuertc"rc¡te ¡ la rama.

con la cat¡eza. ar¡r¡do A \r..s S,¡ricsu¡.ahúra.Dc tudos rnodos.

quc, cor la sacudi
cn e*upcnáo

¡ v

rhon bajaba plancando «» mu.ho.¡tilo. -Gracias so¡rió P¡rli con¡c¡ro al rccibir

yo qué ? -griró Sami desde el árbol. Nosot¡os pensábamos que en el fondo te¡iá ¿Y

queesrarconrenro,puesen unárbol el vera¡o sele iba a há.er mucho másasradablequeencefrado en l¿ escuela, pero é1 se echó a llorar y dijo que no qudíá pasa6e et vefano ni en la escúela úi subi¿o a un árbol. Sáñi nuncaesrá tod2!ía sráis áquí mirúdo? -rclvió a pregunrar u¡á voz fámiliar a ruestra espalda. E1 profesor habia vuelro y rambié¡ obseryaba elárbol-. ¿Q!¡é cs 10 que miráis ahí ar¡iba? Núbes, aviones y pájaros .onresró Pauli. -A Sami -dijinos 1os debás.

8úo

lt,

nificaba pdo no nos lo habia co"tado ¿ los demás porque, en ese momentq Sar¡i l¡abia imit¡do superbién el Brito de Tarzán y se ha' bia.olumpiado e¡ el árbol, dorde no quería pasar susucaciones de vaano de oinguna de

enfadd muchisimo, y después sami habíá escri¡o en el clisral de le ventana €duya'j aunque ni él mismo sabía qué significaba.

Cuando tüni¡amos de explicunos. el pro fco¡ ,ni¡ó ¿ Sami,que stgúí¿ fuotenene ab¡aado a la rama y ginoteaba. -Vaya ex.lmó, se flotó las nraDos y se e¡

el

-Po¡ todos los... Pero si es cierro se ádmiró profesor al ponosc las gafas . i.Qgé es 1o quc

Y claro.le explicahos que l,auli había cho u! ¿vión con las ¡¡oras, y luego se le había quedado enganclrado en una rama, y su madre se iba a

excepto que Tuomas di,o qúe sábia lo que sig-

Nos parecía ombroso que el profesor supiera úepr td bied, y como S¿nri ebía imirar

el srito de Tarzán, creíamos quc hdian une p¡reja estupenda. Uúa pena qu€ al profesor se le cayeraD las safas al suelo y are¡rizaran a .ucsrros pies jústo .úándo estába a punto de llegar hasta Sami. -Cüiiio, ¿qu¿ haes aií? pregunt6la mu' jeL del profeso¡ que de pronro se p¡ekDró en el pario empuiando e1 .ürito de hebe. HabiaD tenido un ¡iño justo después de la excureión con la clue. ,Seguramente sería por 1á impre sión", hábíe sechado e¡ronces et profesor -Oye -le diio a su esposa-. No vs ned¡ sin g¡fás, así que si fueras t¿n añable de... El coche de bo¡¡be¡os acudió muy rápido, aunque e todos nos dio peda que no llegara ha, ciendo soDar la sire¡a. Los bomberos se reían ,nienrras bajaban del árbo1 primero a Sahi

-La

cosecha de este año viene muy pronro

observó un boñbero. -Pues este de aqui ya está algo

ñadurito

El profesor no dijo ni una palabra cuando se marchó a casa con su muier. Sami. po! el contnrio, estaba de muy buen humor -¿Qyé pone en tus notu? -preguntó Sami cuando 1e se habían marchado rodos. "A vcces se te ocu¡ren ideas de bombero,

-leyo llauli. Nos parecía que aquelloestaba muy bien dicho. Después de leer 1as notas, Paúli volvió

y lo echó a volar para demostrarle a Sami cómo habia empezado rodalahisroria.Y qú¿ cosamás exrrañi: el avión se quedó ensanch¿do or.a e" la a hace¡ un avión con ellas

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