Facultad
Teología
Orden sacerdotal
Sacerdocio maya y sacerdocio actual
Fr. Julián Arias Montoya, OSA.
16 de agosto de 2017
SACERDOCIO MAYA Los datos que se tiene sobre el sacerdocio maya antes de la conquista son muy escasos, pero por el contrario gracias a las crónicas posteriores a la colonización se puede saber bastante. Los sacerdotes se distinguían del resto de la sociedad gracias a que usaban largas vestiduras blancas de algodón que contrastaba con sus largas cabelleras que nunca cortaban ni peinaban. En las diferentes prácticas rituales complementaban sus vestiduras con otros rios y ropas de colores según la clase de ritual que pretendían celebrar. Se sabe por ejemplo que el color negro era usado para los ayunos; los colores blanco, amarillo y azul se usaban para los ritos de sacrificio; mientras que el rojo cuando se trataba de una guerra. Era común también que tuvieran tatuajes y deformaciones anatómicas para realzar la figura. En los diferentes cultos, según el caso específico, se practicaba la toma de bebidas rituales y consumo de alucinógenos y grandes cigarros.1 Hacían parte de una casta segunda en la jerarquía con una importante influencia en la sociedad por tener los conocimientos de la ciencia astronómica por lo que eran más cultos no sólo por los conocimientos de astronomía sino además por los arquitectónicos. 1. Clases de sacerdotes:
Halach Uunic: Era quien controlaba el poder civil por tener un parentesco directo con los dioses y en su oficio era una especie de sumo sacerdote. Era conocido como el Halach Uunic, que quiere decir el hombre verdadero” aunque delegaba sus funciones.
1
Ballesteros, Manuel. Cultura y religión de la América Prehispánica. BAC. Madrid 1985. Pg 195.
Ahau Can Mai: era conocido como el hombre “tabaco serpiente de cascabel” y tenía la labor relacionada con la escritura jeroglífica además de interpretar el calendario y formar los nuevos candidatos al sacerdocio.
Nacom : Era el encargado de los sacrificios humanos
Chilam: hacía parte de lo que puede llamarse clero menor y participaba en las profecías, los augurios, el culto, la caza y la artesanía; eran una especia de ayudantes sacerdotales, aunque hacían parte de la casta sacerdotal.
2. Los rituales El sacerdote estaba dedicado en gran parte de su tiempo a su purificación para lograr una comunicación más directa con la divinidad a fin de le permitiera conocer sus designios. Era realizado por los sacerdotes de más alto rango y para alcanzar tal pureza se sometían a ayunos, continencia sexual y al parecer ingerían algún tipo de alucinógeno; pero los mayores rituales que hacían para la purificación tiene que ver con el autosacrificio por medio de cuchillos, dientes de tiburón y aguijones de manta-raya que se clavaban en la lengua, pene, brazos, piernas, orejas y nariz con el fin de ofrecer su sangre a los dioses. Otra clase de rituales realizados estaban vinculados con la práctica de sacrificios humanos. En esto sacrificios se acostumbraba a sacar el corazón o lanzar dardos sobre la víctima, así como la decapitación y el desollamiento. De igual manera se ofrecían sacrificios en las ceremonias de dedicación de los edificios, monumentos y sobre todo en los ritos funerarios de habitantes importantes sin dejar a un lado los sacrificios de animales, sobretodo de perros que servirían de guías en el otro mundo. 3. Influencia del sacerdote La mayor responsabilidad del sacerdote tiene que ver con la integración de una sociedad que tenía una fuerte tendencia hacia la dispersión por culpa de las diferentes dificultades ecológicas que influenciaban sobre la sociedad maya y los llevaba al individualismo. El sacerdote era el responsable de reunirlos para las
tareas comunes y buscaba corregir estas tendencias por medio de principios religiosos. Además de estas tareas de orden social, el sacerdote de la cultura maya era el responsable del cómputo de los años, meses y días. En estos calendarios lo dioses tienen un papel importante pues como el calendario se repite con frecuencia, las deidades actúan según el ciclo que le corresponda en secuencias que no tienen fin. Por su puesto la sociedad estaba atenta a los augurios de los sacerdotes para determinar las acciones. 4. Sacerdocio en la actualidad. Al estudiar los rasgos más generales de los sacerdotes en la cultura Maya, una de las más grandes e importantes en América, pude percatarme que hay un elemento que se relaciona mucho con la realidad del sacerdocio actual. Se trata de la gran influencia que ejerce este sobre la sociedad, aunque aquí hay que decir que esta influencia que, en principio es para el bien, es solo sobre los que profesan la fe católica y viven su fe de manera comprometida. El sacerdote de la actualidad, a pesar de las grandes dificultades que ha tenido que enfrentar por razón del mal testimonio de algunos que por debilidad han caído en alguna falta, sigue teniendo mucha influencia sobre el pueblo de Dios del cual el mismo hace parte. Este mal testimonio ha llevado sin embargo a que su influencia sobre algunos sectores de la sociedad, incluso sobre población creyente e incluso católica, como lo es por ejemplo el caso de los jóvenes, en los que parece haber una cierta apatía sobre hacía los sacerdotes. Cabe aclarar que esta apatía está también muy influenciada por cultura laicista que cada vez toma más fuerza nuestra sociedad, afectando no sólo a los jóvenes sino también a todos los creyentes. Lo cierto de todo, esto es que el sacerdote sigue teniendo hoy en día mucha influencia sobre la sociedad y eso es una punto a favor del que debe valerse para su labor pastoral, en la que busca guiar a las almas hacía la salvación. En la sociedad Maya los sacerdotes eran consultados para tomar las decisiones correctas
gracias a que ellos por su estilo de vida se creía que estaban más cerca de las divinidades. En nuestra fe creemos que Dios está cerca de todos de la misma manera, sin embargo se supone que el sacerdote a imitación de los profetas antiguos, son hombres que sirven a Dios de instrumento para guiar al pueblo, de la gran importancia de que el “siervo de Dios” tenga una profunda relación con el Dios que le ha encomendado la labor de pastorear las almas. Esta relación debe vivirla por medio de la oración profunda, a fin de que pueda interpretar adecuadamente la voluntad de Dios para el pueblo, lo que en palabras de Pablo VI ser “Para hablar a los hombre de pie, se debe hablar primero con Dio de rodillas”. El sacerdote, ha tenido y tendrá una gran influencia para el pueblo de Dios, pero debe recordar que es un siervo de Dios que guía al pueblo en nombre de Dios, por eso debe afianzar cada vez más su relación su Dios y con el pueblo de Dios.